Es un acto de deconstrucción y manipulación del paisaje sonoro utilizado en la película En la escucha, primer largometraje del cineasta Judro Guerrero. El paisaje sonoro interno del cineasta, junto con los latidos de su corazón, son interpretados por un algoritmo que proyecta sobre su cuerpo un montaje simultáneo en función de su ritmo cardíaco.